Según el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), el paciente, de 74 años, falleció por la falta de seguimiento de sus problemas gástricos y por un retraso diagnóstico. No se realizaron informes médicos durante tres años, a pesar de que eran necesarios.
Carmen Flores, presidenta de la entidad Asociación del Defensor del Paciente
El TSJM ha estimado parcialmente el recurso contencioso administrativo presentado por los hijos de la víctima, a los que el Servicio Madrileño de Salud tendrá que indemnizar con 13.000 euros.
El paciente fue intervenido de sus problemas gástricos hace más de medio siglo, por lo que debía estar sometido a un continuo seguimiento para prevenir la aparición de úlceras estomacales. Sin embargo, entre los años 2005 y 2009 no constan informes endoscópicos en su Hospital, el Severo Ochoa de Leganés, a pesar de que ya se adivinaba una gastritis emergente.
Esta falta de diagnóstico y seguimiento provocó el ingreso del paciente en enero de 2009, pero los problemas estomacales, un carcinoma, degeneraron rápidamente hasta el fallecimiento del paciente. Según la sentencia del TSJM, “no se le prestó una asistencia médica correcta (…) y no se utilizaron todos los medios al alcance del servicio sanitario para prevenir, diagnosticar y tratar el cáncer de muñón gástrico”.
La presidenta de la Asocación del Defensor del Paciente, Carmen Flores, ha manifestado que éste es un caso típico de desatención por parte de la administración que acaba en fallecimiento.
Carmen Flores, presidenta de la entidad Asociación del Defensor del PacienteEl TSJM ha estimado parcialmente el recurso contencioso administrativo presentado por los hijos de la víctima, a los que el Servicio Madrileño de Salud tendrá que indemnizar con 13.000 euros.
El paciente fue intervenido de sus problemas gástricos hace más de medio siglo, por lo que debía estar sometido a un continuo seguimiento para prevenir la aparición de úlceras estomacales. Sin embargo, entre los años 2005 y 2009 no constan informes endoscópicos en su Hospital, el Severo Ochoa de Leganés, a pesar de que ya se adivinaba una gastritis emergente.
Esta falta de diagnóstico y seguimiento provocó el ingreso del paciente en enero de 2009, pero los problemas estomacales, un carcinoma, degeneraron rápidamente hasta el fallecimiento del paciente. Según la sentencia del TSJM, “no se le prestó una asistencia médica correcta (…) y no se utilizaron todos los medios al alcance del servicio sanitario para prevenir, diagnosticar y tratar el cáncer de muñón gástrico”.
La presidenta de la Asocación del Defensor del Paciente, Carmen Flores, ha manifestado que éste es un caso típico de desatención por parte de la administración que acaba en fallecimiento.
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