
De esta manera se ven afectados los 180 empleados de Royne del polígono Nuestra Señora de Butarque, integrados en Clesa y que llevan varias semanas manifestándose contra los impagos de Nueva Rumasa y el cese en la producción.
Hace unas semanas numerosas empresas del grupo, que se divide en un complicado entramado financiero, se acogieron al conocido como régimen 'preconcursal', que les permitía negociar cuatro meses con sus acreedores para intentar evitar esta situación.
Nueva Rumasa ha anunciado su decisión esta tarde después de que se conociera que un fondo de inversión estadounidense haya descartado entrar en el capital del grupo.
Comentarios