Otro aspecto de olvido de la administración Montoya es la calle Núñez de Balboa, abandonada, con excrementos caninos y zonas interbloques tan dejados de la mano municipal como el vergonzoso descampado dedicado a Manuel Rodríguez Sales. Una sostenibilidad mil veces anunciada por el alcalde y a penas -o jamás- aplicada.
Comentarios
Igual los vecinos que bajan a sus perros son poco sostenibles.
O la gente que ataja por encima de esos parterres tampoco es muy sostenible.
Gran error el de Montoya usar esa palabra teniendo ciudadanos tan poco "sostenibles".