Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Grupo de Delincuencia Organizada de la Comandancia de Madrid, han desmantelado, el marco de la Operación Ipanema, un grupo organizado y muy violento, integrado por rumanos, especializado en perpetrar robos en viviendas habitadas de Leganés, Las Rozas, Madrid, Valdemoro y Alcalá. A los nueve detenidos, siete hombres y dos mujeres, de entre 19 y 38 años, se les imputan 15 robos en domicilios.
Según informa la Benemérita, la investigación tenía su origen el pasado mes de junio, cuando se tenía conocimiento de la perpetración de un robo en una vivienda de Las Matas (Las Rozas), donde los asaltantes emplearon una violencia extrema contra los septuagenarios moradores del domicilio, que tuvieron que ser atendidos en un centro hospitalario.
La complejidad y violencia del robo acaecido motivó que la investigación fuera desarrollada por el Equipo de Delincuencia Organizada de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid.
Las primeras pesquisas policiales se centraron en el entorno de los asaltados, así como en analizar si se habían producido otros hechos delictivos de características similares en la zona. Poco después, se inició una investigación sobre una empleada doméstica de nacionalidad rumana, ante las sospechas de que ésta pudiera haber facilitado información sobre los moradores del inmueble.
Esta investigación permitió descubrir toda una red delictiva, liderada por un ciudadano rumano, que era el encargado de organizar los robos con una serie de colaboradores bajo su mando. Esta misma persona, asimismo, regentaba un locutorio en la zona de Vallecas utilizado para recepcionar el género sustraído, que posteriormente era vendido o incluso regalado.
Todo golpe que realizaban venía precedido por un reconocimiento previo de la zona, y para ello se valían de la empleada de hogar que les facilitaba información de la posible existencia de caja fuerte, así como si en dicho hogar había cantidades elevadas de dinero en efectivo.
Otra de las fuentes de información con la que contaba la organización y que le permitía recabar datos muy valiosos para sus golpes, era el trabajo que tenía como transportista el subjefe de la banda, el cual realizaba portes para una empresa de muebles y electrodomésticos.
Una vez seleccionado el objetivo, fijaban el día del robo, que era perpetrado preferiblemente en horario diurno, sin importarles si estaban los propietarios en su interior. Éstos eran casi siempre reducidos, incluso utilizando la violencia.
La semana pasada se inició la fase de explotación de esta Operación, que culminó con la detención de nueve personas y la realización de los oportunos registros domiciliarios, donde se han recuperado gran cantidad de efectos, entre ellos joyas, muchas de las cuales ya han sido reconocidas por sus legítimos propietarios.
Se trata de siete hombres y dos mujeres. La Autoridad Judicial competente ha decretado el inmediato ingreso en prisión de todos los detenidos varones, que supuestamente eran los autores materiales de los asaltos, así como el de la mujer que, valiéndose de su condición de empleada doméstica, proporcionó la información necesaria para el violento asalto que motivó el inicio de esta investigación, que sigue abierta y que no descarta nuevas detenciones.
Según informa la Benemérita, la investigación tenía su origen el pasado mes de junio, cuando se tenía conocimiento de la perpetración de un robo en una vivienda de Las Matas (Las Rozas), donde los asaltantes emplearon una violencia extrema contra los septuagenarios moradores del domicilio, que tuvieron que ser atendidos en un centro hospitalario.
La complejidad y violencia del robo acaecido motivó que la investigación fuera desarrollada por el Equipo de Delincuencia Organizada de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid.
Las primeras pesquisas policiales se centraron en el entorno de los asaltados, así como en analizar si se habían producido otros hechos delictivos de características similares en la zona. Poco después, se inició una investigación sobre una empleada doméstica de nacionalidad rumana, ante las sospechas de que ésta pudiera haber facilitado información sobre los moradores del inmueble.
Esta investigación permitió descubrir toda una red delictiva, liderada por un ciudadano rumano, que era el encargado de organizar los robos con una serie de colaboradores bajo su mando. Esta misma persona, asimismo, regentaba un locutorio en la zona de Vallecas utilizado para recepcionar el género sustraído, que posteriormente era vendido o incluso regalado.
Todo golpe que realizaban venía precedido por un reconocimiento previo de la zona, y para ello se valían de la empleada de hogar que les facilitaba información de la posible existencia de caja fuerte, así como si en dicho hogar había cantidades elevadas de dinero en efectivo.
Otra de las fuentes de información con la que contaba la organización y que le permitía recabar datos muy valiosos para sus golpes, era el trabajo que tenía como transportista el subjefe de la banda, el cual realizaba portes para una empresa de muebles y electrodomésticos.
Una vez seleccionado el objetivo, fijaban el día del robo, que era perpetrado preferiblemente en horario diurno, sin importarles si estaban los propietarios en su interior. Éstos eran casi siempre reducidos, incluso utilizando la violencia.
La semana pasada se inició la fase de explotación de esta Operación, que culminó con la detención de nueve personas y la realización de los oportunos registros domiciliarios, donde se han recuperado gran cantidad de efectos, entre ellos joyas, muchas de las cuales ya han sido reconocidas por sus legítimos propietarios.
Se trata de siete hombres y dos mujeres. La Autoridad Judicial competente ha decretado el inmediato ingreso en prisión de todos los detenidos varones, que supuestamente eran los autores materiales de los asaltos, así como el de la mujer que, valiéndose de su condición de empleada doméstica, proporcionó la información necesaria para el violento asalto que motivó el inicio de esta investigación, que sigue abierta y que no descarta nuevas detenciones.
Comentarios
01 de diciembre de 2009 LEGANÉS
ALBERTO GASCO
El juzgado de Primera Instancia número 8 de Leganés ha desestimado la demanda interpuesta por el Grupo Popular de Leganés contra la empresa pública de comunicación del Ayuntamiento de Leganés (LEGACOM) solicitando el "derecho de rectificación".
En concreto, Jesús Gómez y Eduardo Jiménez -los concejales que firmaban la demanda- hacían referencia en su escrito a una nota de prensa publicada en la página Web de Legacom el pasado 14 de julio, donde según ellos "se vierten una serie de descalificaciones, de juicios, de intenciones y de falsedades contra ellos".
Los populares remitieron días más tarde una carta al gerente de la empresa pública, Manuel Hidalgo, quien no tuvo en cuenta su publicación
La defensa de LEGACOM se basa en que el derecho de rectificación tienen lugar "cuando los hechos son inexactos" pero nunca "en las opiniones o enfoques", argumentando en su defensa "el derecho a la libertad de expresión".
Dice la sentencia del juzgado número 8 que el escrito de rectificación dirigido por el portavoz del Grupo Popular, Jesús Gómez, "no cumple en modo alguno el requisito legalmente establecido de limitarse a los hechos de la información que se desea rectificar". Y ahonda aún más explicando que Gómez "no se limita e exponer los hechos que se consideran inexactos, sino que se incluyen valoraciones y opiniones innecesarios para la comprensión de la rectificación".
Los representantes de la empresa de comunicación del consistorio leganense deberán acudir de nuevo al juzgado el próximo 14 de diciembre. En esta ocasión, para responder a una demanda interpuesta por el portavoz del Grupo municipal ULEG, quien también solicita la rectificación de un video editado por LEGACOM a raíz de la celebración de un Pleno municipal.