Fiesta de recibimiento a los 39 niños saharauis que pasarán el verano en Leganés

Los pequeños visitaron las dependencias de la Policía Local y de los Bomberos, en una jornada en la que disfrutaron especialmente del circuito de Educación Vial y del baño de agua y espuma con que les obsequiaron los bomberos
Los 39 niños saharahuis que pasarán este verano en casas de familias acogedoras de Leganés, hasta el próximo 22 de agosto, fueron recibidos en el edificio de Seguridad Ciudadana (Calle Chile, 1) por responsables municipales, entre los que estaban las concejales de Juventud y Cultura, Beatriz Alonso, y de Seguridad Ciudadana y Festejos Noemí Selas. Además, estaba presente el delegado del Pueblo Saharaui en la Comunidad de Madrid, Abdulá Arabi, y el Presidente de la Asociación ‘Leganés Por el Pueblo Saharaui’ en Leganés, José Luis Sampedro. Al acto asistieron también muchas de las familias acogedoras que cuidaran de los niños acogidos hasta el próximo día 22 de agosto, dentro de la XVII edición de programa ‘Vacaciones en Paz’.

El Ayuntamiento entregó a cada uno de los recién llegados del Sáhara un regalo de bienvenida y los 39 niños pudieron visitar las dependencias de la Policía Local y la emisora policial, y asistir a una charla sobre Educación Vial. Posteriormente se trasladaron a la sede de los Bomberos, situada en la calle Jesús Miguel Hadad, donde disfrutaron de una divertida fiesta con baño de espuma y agua, además de visitar algunas dependencias, como el gimnasio de los bomberos.

La Asociación ‘Leganés Por el Pueblo Saharaui’, a través de su presidente, José Luis Sampedro, ha querido agradecer tanto al Ayuntamiento de Leganés como a las familias acogedoras de estos niños su colaboración y su esfuerzo para llevar a buen término este programa de acogida humanitaria.

A toda España llegarán este verano unos 9.000 niños y niñas saharauis. Durante estos dos meses de estancia en nuestro país se les realizarán pruebas médicas y llevarán una alimentación adecuada, ambas cosas imposibles de realizar en los campamentos de refugiados; y también podrán librarse de los más de 50 grados de temperatura que se llegan a alcanzar en el desierto durante el verano. Con su estancia en la ciudad se potencia el encuentro de estos niños y niñas saharauis con nuestro entorno, concienciando a la sociedad local sobre el grave problema que padece el pueblo saharaui.

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