Viernes 4 de mayo a las 8 h en la calle San Luis, 14. La Fortuna
Así lo denuncia la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH)
La historia de Federico y de su compañera Mª Carmen es la de cientos de miles de familias, muchas de las cuales han sido desahuciadas ya como consecuencia de la voracidad de la banca.
Federico era un trabajador autónomo que se ganaba la vida como maquinista de excavadoras. Su compañera, Mª Carmen, trabajaba en una fábrica. Con la suma de ambos sueldos obtuvieron una hipoteca del Banco Pastor por valor de cerca de 115.000 euros para adquirir la vivienda en la que viven con su hijo de 17 años, en la calle San Luis, 14, del leganense distrito de La Fortuna.
Ambos empleos les permitían pagar una letra que rondaba los 800 euros, hasta que estalló la crisis y ambos se quedaron en el paro. Federico, autónomo, no tenía derecho a recibir la prestación por desempleo, así que dejaron de pagar la letra y el Banco Pastor ordenó la ejecución hipotecaria.
Los intentos de esta familia por negociar una salida resultaron infructuosos. La sorpresa fue mayúscula cuando el pasado 19 de abril se personó en su casa una comisión judicial acompañada por el procurador del banco y varios agentes de policía para ejecutar un lanzamiento que ni siquiera habían comunicado. Y amenazaron con volver el próximo 4 de mayo.
"Ese día, si no lo impedimos, -dicen desde la Plataforma- volverán para dejarles en la calle. El Banco Pastor, una de las entidades bancarias que más activos tóxicos tiene vinculados al negocio del ladrillo, vendrá a quedarse con la vivienda de esta familia trabajadora a la que, además, le exigirá una deuda que les condena a la exclusión social durante toda su vida".
Así lo denuncia la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH)
La historia de Federico y de su compañera Mª Carmen es la de cientos de miles de familias, muchas de las cuales han sido desahuciadas ya como consecuencia de la voracidad de la banca.
Federico era un trabajador autónomo que se ganaba la vida como maquinista de excavadoras. Su compañera, Mª Carmen, trabajaba en una fábrica. Con la suma de ambos sueldos obtuvieron una hipoteca del Banco Pastor por valor de cerca de 115.000 euros para adquirir la vivienda en la que viven con su hijo de 17 años, en la calle San Luis, 14, del leganense distrito de La Fortuna.
Ambos empleos les permitían pagar una letra que rondaba los 800 euros, hasta que estalló la crisis y ambos se quedaron en el paro. Federico, autónomo, no tenía derecho a recibir la prestación por desempleo, así que dejaron de pagar la letra y el Banco Pastor ordenó la ejecución hipotecaria.
Los intentos de esta familia por negociar una salida resultaron infructuosos. La sorpresa fue mayúscula cuando el pasado 19 de abril se personó en su casa una comisión judicial acompañada por el procurador del banco y varios agentes de policía para ejecutar un lanzamiento que ni siquiera habían comunicado. Y amenazaron con volver el próximo 4 de mayo.
"Ese día, si no lo impedimos, -dicen desde la Plataforma- volverán para dejarles en la calle. El Banco Pastor, una de las entidades bancarias que más activos tóxicos tiene vinculados al negocio del ladrillo, vendrá a quedarse con la vivienda de esta familia trabajadora a la que, además, le exigirá una deuda que les condena a la exclusión social durante toda su vida".
Comentarios
es que en este país gobierna la banca, pp y psoe solo hacen repartirse privilegios pero quien manda es la banca
¿cuándo una solución para miles y miles de familias en paro? ¿los dejamos en la calle? ¿en la marginalidad y ruina más absoluta?