El ERE de Royne Leganés podría paralizarse al haber un comprador interesado en la empresa de Nueva Rumasa

La Administración Concursal de Clesa y el Comité de Empresa de los Trabajadores han acordado el ERE extintivo para los 361 empleados de esta planta, lo que supondrá el fin de esta unidad productiva dentro del conglomerado empresarial de Nueva Rumasa.

Para la plantilla de Royne Leganés también hay encima de la mesa un ERE extintivo, aunque, dentro del periodo concursal en el que está inmerso, parece que hay un comprador que pudiera estar interesado con la fábrica.

Según un auto del Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid al cual ha tenido acceso Europa Press, se establece esta salida para una de las cuatro unidades de Clesa, S.L, aunque se ha abierto un período para que las partes puedan interponer un recurso de suplicación, aunque en ningún caso este recurso suspendería la tramitación del concurso ni de ningún incidente concursal.

El acuerdo entre los representantes de los trabajadores y los administradores del concurso de la empresa contempla una indemnización de 20 días por año trabajado, con un tope máximo de una anualidad.

El plazo para ejecutar esta anualidad es de 6 meses. Para ello, se cuenta con una dotación máxima de 27.000 euros de los Fondos de Garantía Salarial (FOGASA), mientras que el resto del total será abonado por la administración del concurso. En este plazo, la Administración Concursal deberá vender activos de la empresa para poder afrontar los pagos.

El ERE extintivo afecta a los prejubilados, a los trabajadores de las delegaciones territoriales de la empresa y al resto de la plantilla que trabajaba en el número 67 de la calle Cardenal Herrera Oria. Para Muñoz, portavoz de CC.OO. en el Comité de Empresa, constituye "el mejor acuerdo dentro de que la caja, además de no tener dinero, estaba lleno de deudas".

Se pone fin así a la unidad más importante de las cuatro que tiene la empresa Clesa S.L, el "buque insignia" dentro del conglomerado de Nueva Rumasa. Las otras tres plantas son las de Helados Royne en Leganés, la de Bascones del Agua en Burgos y la de Caldera de Reyes en Pontevedra.

No ha sido el caso del centro de Herrera Oria, que de esta forma se ve abocado a su cierre, dentro de una empresa con más de 70 años en el mercado nacional de producción alimentaria

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Mucho ánimo amigos! Ojalá todos conservéis vuestro puesto de trabajo!
Anónimo ha dicho que…
Y sigáis haciendo esos ricos helados. ¡Cuánto los echo de menos!