La apertura de la estación de La Fortuna sube la demanda de la línea 11 más del 10%

Ascenso registrado durante los meses de octubre y noviembre


o Las entradas a la estación de La Peseta han crecido alrededor de un 40 por ciento con respecto al mes de octubre del pasado año

o Es un ejemplo de sostenibilidad por su respeto medioambiental, accesibililidad y elementos que favorecen la eficiencia energética


La Línea 11 de Metro de Madrid ha experimentado un aumento de la demanda superior al 11 por ciento desde la entrada en servicio de la nueva estación de La Fortuna, que fue inaugurada el pasado 5 de octubre y permite conectar el barrio de Leganés con Madrid en tan solo 15 minutos.

La nueva estación ha supuesto también el crecimiento del número de entradas a la estación de La Peseta, que ha visto cómo en el mes de octubre su demanda superaba en un 41 por ciento la registrada en el mismo periodo del pasado año.

No en vano, este nuevo tramo de la Línea 11 de Metro que conecta la estación de La Peseta, en el PAU de Carabanchel, con el barrio de la Fortuna de Leganés, la primera ampliación de Metro que entra en servicio esta legislatura, daba respuesta a una demanda histórica de los 15.000 vecinos de este barrio que, gracias a este nuevo tramo, pueden llegar en tan solo 15 minutos a Madrid y conectar en la estación de Plaza Elíptica con el resto de la red de Metro.

Las obras de ampliación de la línea 11 hasta el barrio de La Fortuna, que supusieron la construcción de 3,2 kilómetros de túnel, tres aparcamientos de bicicletas y 250 metros de “carril bici” para facilitar a los ciclistas el acceso a las inmediaciones de la estación y para favorecer la intermodalidad, supusieron una inversión de 201,5 millones de euros, 50 de ellos financiados con fondos FEDER de la Unión Europea.

La nueva estación de Metro de La Fortuna se ubica bajo el Parque Serafín Díez Antón, un punto neurálgico del barrio muy importante para la vida de sus vecinos. Las obras incluyeron la reconstrucción de esta zona verde, de casi 31.200 metros cuadrados.

Una estación sostenible

Además de la mejora de la movilidad, hay que destacar los esfuerzos que se han realizado en su diseño y construcción en materia de innovación, eficiencia energética, respeto medioambiental y accesibilidad.

En los ascensores, por ejemplo, se ha mejorado el diseño de sus botoneras y elementos que reducen el espacio horizontal entre la losa y el propio ascensor, con la supervisión y acuerdo de las asociaciones de discapacitados, lo que mejora su accesibilidad.

El compromiso medioambiental se plasma en la instalación de papeleras agrupadas que permiten a los clientes poder segregar los residuos, facilitando así su mejor gestión.

La entrada a la estación se realiza a través de un templete acristalado que permite utilizar la luz solar en ciertas horas del día para iluminar el acceso. En el resto de la estación se han incorporado elementos de iluminación con tecnología LED, que permite un ahorro en el consumo eléctrico.

"Todo ello permite asegurar que la estación de la línea 11 sea todo un ejemplo de sostenibilidad e inclusión social facilitando la movilidad en transporte público a los habitantes de este barrio, donde llegar, hace no muchos años, se consideraba una aventura", afirman desde el Metro de Madrid.

Comentarios