El CD Leganés se conjura esta semana para afrontar el próximo domingo contra el At. Ciudad Lorquí el partido más trascendental de los últimos tiempos, con el objetivo de lograr una victoria que permita a los madrileños jugar los ‘play-off’ de ascenso a Segunda, y hacer así justicia al trabajo realizado durante toda la temporada.
Desde la octava jornada de Liga, cuando el Leganés alcanzaba la tercera plaza de la clasificación del grupo II de Segunda división B, los pepineros han sido equipo de ‘play-off’. A partir de entonces, nunca ocuparon un lugar que no les correspondiera. Nunca salieron de los cuatro primeros puestos. Pero sobre todo, nunca dejaron de pelear por un objetivo, por un sueño. Volver a Segunda división cinco años después.
Así lo entendió la afición del Municipal de Butarque, que recobró la ilusión de ver al equipo de la ciudad de nuevo entre los grandes del fútbol español. Y es que tenían razones para hacerlo. El juego de los de David Gordo impresionaba a toda la categoría de bronce. La seguridad en la portería de Raúl Moreno, la organización defensiva que mostraba la zaga blanquiazul, junto con la coherencia mostrada en el centro del campo y la precisa definición en la punta de ataque encandilaba a los más incrédulos. Y no es una afirmación realizada desde el forofismo. El incremento en el número de abonados para la segunda vuelta es la demostración más evidente. 500 nuevos abonos, que se dice pronto.
El estadio de Butarque volvía a vestirse de gala, como en las grandes citas. Desde el mes de enero, la asistencia nunca fue menor de los 4.000 aficionados, logrando números propios de Segunda división A. Más de 7.000 seguidores acudieron a presenciar partidos como el del Alfaro y el Cartagena. Este último se pudo disputar gracias al sacrificio y ayuda de los aficionados del Leganés, cuerpo técnico, directiva, plantilla, y todos aquellos que aquel sábado diez de enero se acercaron hasta el estadio para retirar la nieve que cubría el terreno de juego.
Los leganenses disfrutaban con el juego de su equipo, se sentían orgullosos de que después de tanto tiempo el ‘Lega’ demostrara al mundo que todavía sigue siendo un grande del fútbol español. Hasta en tres encuentros de esta temporada se pudo ver como el público hacía la ‘ola’ en Butarque. Normal que el Leganés fuera el equipo más temido en su casa. Ha ganado en 13 de los 19 partidos que ha disputado en su feudo.
Tampoco podemos olvidar el esfuerzo que realizó la plantilla durante la primera vuelta, cuando no podían cobrar sus nóminas por culpa de la difícil situación económica que pasó el Club. Pero no fue excusa para que el equipo se aupara en la decimonovena jornada al liderato de la clasificación, en donde ha permanecido durante seis jornadas de forma consecutiva y hasta en 12 ocasiones en todo el campeonato.
No hay duda de que esta temporada está dejando muchos recuerdos para la historia, y es ahora cuando la plantilla, los aficionados y todos los leganenses deben mirar con orgullo todas las circunstancias vividas para coger aire, retomar esa ilusión y para que hasta el último minuto de esta temporada reine el optimismo. El mismo que ha provocado que el Club encargara camisetas para sus aficionados, que tuviera que organizar viajes para responder al deseo de la hinchada de animar al equipo fuera de casa, e impulsar todo tipo de iniciativas ante una afición ejemplar, la cual ha sido identificada por numerosos periodistas y seguidores de Segunda división B como la mejor afición de la categoría.
Por todo ello, ahora equipo y afición han de estar más unidos que nunca para seguir luchando por volver a Segunda división, por un sueño, por un destino. Ese destino por el que el ‘Lega’ ha estado luchando durante cinco años desde la humildad y el trabajo.
“La batalla que se avecina será larga, pero recordemos siempre que no importa qué obstáculos se interponen en nuestro camino. Nada puede resistirse al poder de cientos de miles de voces que piden el cambio. Sí, podemos.”
Barack Obama.
Presidente de los Estados Unidos.
Desde la octava jornada de Liga, cuando el Leganés alcanzaba la tercera plaza de la clasificación del grupo II de Segunda división B, los pepineros han sido equipo de ‘play-off’. A partir de entonces, nunca ocuparon un lugar que no les correspondiera. Nunca salieron de los cuatro primeros puestos. Pero sobre todo, nunca dejaron de pelear por un objetivo, por un sueño. Volver a Segunda división cinco años después.
Así lo entendió la afición del Municipal de Butarque, que recobró la ilusión de ver al equipo de la ciudad de nuevo entre los grandes del fútbol español. Y es que tenían razones para hacerlo. El juego de los de David Gordo impresionaba a toda la categoría de bronce. La seguridad en la portería de Raúl Moreno, la organización defensiva que mostraba la zaga blanquiazul, junto con la coherencia mostrada en el centro del campo y la precisa definición en la punta de ataque encandilaba a los más incrédulos. Y no es una afirmación realizada desde el forofismo. El incremento en el número de abonados para la segunda vuelta es la demostración más evidente. 500 nuevos abonos, que se dice pronto.
El estadio de Butarque volvía a vestirse de gala, como en las grandes citas. Desde el mes de enero, la asistencia nunca fue menor de los 4.000 aficionados, logrando números propios de Segunda división A. Más de 7.000 seguidores acudieron a presenciar partidos como el del Alfaro y el Cartagena. Este último se pudo disputar gracias al sacrificio y ayuda de los aficionados del Leganés, cuerpo técnico, directiva, plantilla, y todos aquellos que aquel sábado diez de enero se acercaron hasta el estadio para retirar la nieve que cubría el terreno de juego.
Los leganenses disfrutaban con el juego de su equipo, se sentían orgullosos de que después de tanto tiempo el ‘Lega’ demostrara al mundo que todavía sigue siendo un grande del fútbol español. Hasta en tres encuentros de esta temporada se pudo ver como el público hacía la ‘ola’ en Butarque. Normal que el Leganés fuera el equipo más temido en su casa. Ha ganado en 13 de los 19 partidos que ha disputado en su feudo.
Tampoco podemos olvidar el esfuerzo que realizó la plantilla durante la primera vuelta, cuando no podían cobrar sus nóminas por culpa de la difícil situación económica que pasó el Club. Pero no fue excusa para que el equipo se aupara en la decimonovena jornada al liderato de la clasificación, en donde ha permanecido durante seis jornadas de forma consecutiva y hasta en 12 ocasiones en todo el campeonato.
No hay duda de que esta temporada está dejando muchos recuerdos para la historia, y es ahora cuando la plantilla, los aficionados y todos los leganenses deben mirar con orgullo todas las circunstancias vividas para coger aire, retomar esa ilusión y para que hasta el último minuto de esta temporada reine el optimismo. El mismo que ha provocado que el Club encargara camisetas para sus aficionados, que tuviera que organizar viajes para responder al deseo de la hinchada de animar al equipo fuera de casa, e impulsar todo tipo de iniciativas ante una afición ejemplar, la cual ha sido identificada por numerosos periodistas y seguidores de Segunda división B como la mejor afición de la categoría.
Por todo ello, ahora equipo y afición han de estar más unidos que nunca para seguir luchando por volver a Segunda división, por un sueño, por un destino. Ese destino por el que el ‘Lega’ ha estado luchando durante cinco años desde la humildad y el trabajo.
“La batalla que se avecina será larga, pero recordemos siempre que no importa qué obstáculos se interponen en nuestro camino. Nada puede resistirse al poder de cientos de miles de voces que piden el cambio. Sí, podemos.”
Barack Obama.
Presidente de los Estados Unidos.
Comentarios
¡Aupa Lega!
Lo primero que hay que hacer es retrasar como sea el comienzo del partido, todos empiezan a las 18'00 h, pero....hay que tirar papelillos, globos o algún balón al césped, que algún "despistado" se meta en el campo y haya que sacarlo, que los jugadores se retrasen en salir, algún homenaje a alguién, o nos inventamos un minuto de silencio, cualquier cosa, y claro está que los jugadores finjan faltas y lesiones durante el partido. Siempre tienen que ir más avanzados los partidos de Vecindario y de Pájara. Una vez hecho esto, hay que mantener el 0-0 en espera de acontecimientos, en los 10 últimos minutos si no van ganando ni el Castilla ni el Alcorcón esperamos a que terminen, y entonces en los 10 minutos de retraso pues.....un golito del Ciudad...y clasificados. Si va ganando el Alcorcón o el Castilla (y sobre todo claramente) pues.....un golito del Leganés y estos aseguran el playoff. Sencillo....¿no?
La historia del fútbol está llena de estas anecdotas