El alcalde, Rafael Gómez Montoya, anima a los vecinos de San Nicasio a "ir todos" a la Comunidad de Madrid para pedirle que dé su visto bueno al proyecto para derruir y reconstruir unas 500 viviendas de las décadas de los 50, 60 y 70 si la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio decide 'tumbar' el proyecto, según EP.
En una reunión con estos vecinos, Montoya aseguró que "para el verano" se conocerá con toda probabilidad la decisión del Ejecutivo regional sobre una iniciativa que, según dijo, permitirá "rejuvenecer" la ciudad al ofrecer nuevos servicios en los inmuebles, como ascensores, plazas de garaje o elementos bioclimáticos en las viviendas. "Lo que me preocupa es que haya personas mayores que no puedan bajar a la calle porque carecen de ascensor".
En este sentido, el alcalde consideró que la operación, adjudicada a Larcovi, es "viable". De hecho, aseguró que el proyecto cuenta con el respaldo de un 96,5% de los afectados por las previsibles demoliciones, según la encuesta que realizó en diciembre la empresa responsable del proyecto.
Para respaldar esta iniciativa, Gómez Montoya apuntó que el proyecto no supondrá desembolso alguno a los vecinos, ya que la operación se financiará con sus propias plusvalías generadas a raíz de la venta de los excedentes de pisos de renta libre.
"Vamos a cambiar metros por metros", puntualizó el regidor para explicar que los vecinos no realizarán desembolso alguno, a excepción de si quieren más metros, en cuyo caso abonarán el "exceso de más" al precio del módulo vigente en ese momento.
El proyecto de San Nicasio, uno de los barrios más antiguos de Leganés, consiste en la demolición de los inmuebles más antiguos y en peor estado y su posterior reconstrucción, lo que posibilitaría una mejora sustancial en las viviendas y un replanteamiento general del barrio, que "vería esponjadas sus zonas públicas con más espacios verdes y zonas interbloques", según el alcalde.
Comentarios
Para que sea económicamente viable, tienen casi que doblar el número de viviendas, lo que resulta excesivo.
La encuesta que se hizo creo que no responde a la realidad, pues se hicieron preguntas sesgadas para que saliera favorable a la rehabilitación.
Parece que Montoya tiene que tener viva alguna reivindicación frente la Comunidad de Madrid para amenazar con movilizaciones vecinales, y como ya no tiene el Centro de Salud, saca ésta. En este caso, como no vaya Larcovi a manifestarse (que es para quien se ha preparado la rehabilitación), a los vecinos afectados no creo que Montoya los saque de casa hasta que no le explique como se llevará a cabo esa rehabilitación, que es más complicada de lo que se ha contado.
Las políticas, sean de vivienda, sanidad, infraestructuras..., tienen que diseñarse para cubrir las necesidades del pueblo, no las particulares políticas.
EMSULE y no LARCOVY se encuentra en la obligación de asumir el compromiso y el riesgo de la rehabilitación del vetusto San Nicasio, aunque para ello se tenga que dar la vuelta a la tortilla. Ello generaría la absoluta confianza de los vecinos al sentirse respaldados por su empresa municipal del suelo.
Propongo,como acto de buena voluntad hacia los nicasianos y en tanto no sea colocada la primera piedra del "Nuevo San Nicasio", que Rafael Gómez Montoya, alcalde leganense, de las órdenes pertinentes para que de una "santa vez" se microurbanice la insultante Plaza que circunda a la ermita de Ventura Rodríguez Tizón (Pza.San Nicasio)y demuestre sus agallas llamando a las puertas del Ministro de Fomento y, por tanto,jefe del ADIF, José Blanco (el irreconocible)para recuperar el espacio que ocupa el embarcadero militar (C/Asturias, López Aranguren y estación central de Leganés C-5.
Es fácil, tan sólo hay que creérselo.
Vicente Gordillo Carmona