ULEG rechaza que Leganés se hermane con la localidad marroquí de Targhist por "las sospechas de corrupción policial y de contrabando de hachís" denunciadas por DLEGANÉS
Tras la denuncia de este periódico sobre las graves sospechas de corrupción policial y contrabando en la ciudad marroquí con la que quiere hermanarse el alcalde, el edil Carlos Delgado explicó que “debemos ser estrictos e implantar unos criterios en nuestra política de hermanamiento con otras ciudades, y no como ocurre hasta ahora que, por lo que parece, el único requisito es el número de personas de un país que haya emigrado a nuestra ciudad, con lo que da la impresión de que el objetivo es únicamente electoralista”
Hace unos días, apareció una información en un medio de prensa local sobre Targhist (Marruecos), la ciudad propuesta por la delegación de Cooperación, presidida por el alcalde socialista Rafael Gómez Montoya, para un nuevo hermanamiento. En dicha información se denunciaba que Targhist era famosa por sus casos de corrupción policial y el contrabando de hachís, hechos que se corroboraban con vídeos e informaciones difundidas por Internet y diversos medios de comunicación.
Por ello, Unión por Leganés (ULEG) quiere precisar que si bien ha estado de acuerdo con las líneas generales del plan de cooperación internacional de este ayuntamiento, así como del hermanamiento de Leganés y la ciudad de Macará (Ecuador) o de enviar ayuda de emergencia a Gaza, y ha apoyado cualquier acción de colaboración humanitaria con quien lo haya necesitado, en el caso particular de Targhist, salvo aclaraciones convincentes, ni apoyará ni votará a favor del hermanamiento con una localidad que parte con estos precedentes.
“En ULEG pensamos que igual que la Unión Europea no permite la entrada de cualquier nuevo miembro sin cumplir unos requisitos; en Leganés y con el destino del dinero público debemos ser igual de estrictos e implantar unos criterios rigurosos en nuestra política de hermanamiento con otras ciudades, y no como ocurre hasta ahora que, por lo que parece, el único requisito es el número de personas de un país que haya emigrado a nuestra ciudad, con lo que puede dar la impresión de que realmente el objetivo de estos hermanamientos es ganar votos cuando la población inmigrante pueda votar en las elecciones municipales, cuestión en la que se está avanzando por parte del Gobierno de la Nación”, concluyó Carlos Delgado, concejal de ULEG.
Tras la denuncia de este periódico sobre las graves sospechas de corrupción policial y contrabando en la ciudad marroquí con la que quiere hermanarse el alcalde, el edil Carlos Delgado explicó que “debemos ser estrictos e implantar unos criterios en nuestra política de hermanamiento con otras ciudades, y no como ocurre hasta ahora que, por lo que parece, el único requisito es el número de personas de un país que haya emigrado a nuestra ciudad, con lo que da la impresión de que el objetivo es únicamente electoralista”
Hace unos días, apareció una información en un medio de prensa local sobre Targhist (Marruecos), la ciudad propuesta por la delegación de Cooperación, presidida por el alcalde socialista Rafael Gómez Montoya, para un nuevo hermanamiento. En dicha información se denunciaba que Targhist era famosa por sus casos de corrupción policial y el contrabando de hachís, hechos que se corroboraban con vídeos e informaciones difundidas por Internet y diversos medios de comunicación.
Por ello, Unión por Leganés (ULEG) quiere precisar que si bien ha estado de acuerdo con las líneas generales del plan de cooperación internacional de este ayuntamiento, así como del hermanamiento de Leganés y la ciudad de Macará (Ecuador) o de enviar ayuda de emergencia a Gaza, y ha apoyado cualquier acción de colaboración humanitaria con quien lo haya necesitado, en el caso particular de Targhist, salvo aclaraciones convincentes, ni apoyará ni votará a favor del hermanamiento con una localidad que parte con estos precedentes.
“En ULEG pensamos que igual que la Unión Europea no permite la entrada de cualquier nuevo miembro sin cumplir unos requisitos; en Leganés y con el destino del dinero público debemos ser igual de estrictos e implantar unos criterios rigurosos en nuestra política de hermanamiento con otras ciudades, y no como ocurre hasta ahora que, por lo que parece, el único requisito es el número de personas de un país que haya emigrado a nuestra ciudad, con lo que puede dar la impresión de que realmente el objetivo de estos hermanamientos es ganar votos cuando la población inmigrante pueda votar en las elecciones municipales, cuestión en la que se está avanzando por parte del Gobierno de la Nación”, concluyó Carlos Delgado, concejal de ULEG.
Comentarios
Me pregunto quienes son los que dieron el O.K. a este hermanamiento, desde arriba hasta el último mono.