'Denunciamos acoso policial en La Zona desde abril. Somos empresarios, no delincuentes'

"Desde que en abril empezó el acoso policial, con 16 agentes todos los viernes y sábados, a la 3,30 horas, a las puertas de nuestros locales, los 18 empresarios de La Zona hemos visto disminuir nuestros ingresos un 40 por ciento. Y los jóvenes leganenses se han visto obligados a desplazarse a Alcorcón y Getafe que son más permisivos".

Quienes así se explican son Jorge Javier Pérez Hernández, y su hermano, Alfredo, dueños desde hace 15 y 25 años de los pubs 'Kronnen' y 'Potitos', respectivamente, en la calle San Nicasio de Leganés, más conocida como La Zona.

Están poniendo en marcha la Asociación de Bares de Copas de Leganés "para reivindicar nuestros derechos y dialogar con más fuerza con la administración", a la vez que reclaman al Ayuntamiento "más flexibilidad" en los horarios.

"Entendemos que hay que respetar un horario, pero no puede venir aquí la Policía Local con malos modos, con la braga hasta los ojos, los guantes de antidisturbios y actitud chulesca, a decirnos que si a las 4,01 horas hay alguien en el pub nos multan con 3.000 euros", señalan, quienes subrayan que "esta no es una zona confictiva, ni siquiera tenemos porteros".
Zona de copas tranquila sin problemas con los vecinos

Recuerdan que a la gente no se la puede echar a la calle en 30 minutos, sino poco a poco, como siempre, y que no es problema si a las 3,30 horas quitan la música, apagan las luces, y se quedan dentro de los locales, totalmente insonorizados. "No puede haber 18 policías en la puerta de nuestros locales para que cerremos. Esto no es democracia. No pueden entrar los agentes un minuto después de las 4 y presionarnos, a veces con malos modos, para que, hasta los camareros, salgan a la calle".

Critican que la concejala de Seguridad, Laura Oliva, no les haya querido recibir, aunque sí lo ha hecho el director de Seguridad, Óscar Oliveira, que no se comprometió a nada.

"Si sigue el acoso de los policías y la crisis, cerrará La Zona. Nosotros hemos tenido que despedir a varios camareros. No tenemos problemas con los vecinos. Somos empresarios. No delincuentes. Y no nos merecemos esta presión policial".

Comentarios